Dentro de la Semana de la ópera que la Temporada de Concierto Cuenca Ciudad de Música (QCM) realiza como nuevo proyecto para la cuarta edición,  se pondrá en escena la ópera de W. A. Mozart  “La Finta Semplice” una obra que el compositor de Salzburgo compuso a la temprana edad de 12 años.

En esta ocasión se realiza una colaboración entre Cuenca Ciudad de Música y el Conservatorio Profesional de música “Pedro Aranaz” de Cuenca, mediante un taller de ópera que comenzó en el pasado mes de Noviembre de 2015, donde algunos profesores y alumnos del centro educativo musical participarán en la producción.

Todo aquello que se precisa para poner en marcha una producción de ópera se trabaja en el taller de ópera, Músicos de Orquesta, cantantes, regiduría, escena, vestuario y caracterización.

El carácter lúdico de nuestra propuesta nos ha permitido hacer de la necesidad una virtud y convertir las limitaciones reales de la producción de una ópera en un proyecto pedagógico que al unir diferentes departamentos con el que consta un Conservatorio se pueda enseñar como es una verdadera producción musical escénica y musical desde los diferentes campos artísticos que participan en ella. La formación de una Orquesta, preparación de las partes cantadas y escénicas con las que cuenta la ópera, Escenografía, Regiduría, utilería y vestuario necesario para la realización de una proyecto operístico.

Se elige el género lírico por ser el más completo que existe dentro de todas las disciplinas musicales, ya que dentro del género operístico se concentran música, texto y teatro. A parte de materias de formación profesional muy ligadas a la música y la escena, como sería la realización de una escenografía, o la coordinación de regiduría, vestuario o caracterización.

A partir de esta idea de montar una producción de ópera, trataremos de hacer un montaje lo más profesional posible, desde un punto de vista pragmático lo más cercano a la realidad profesional de lo que sería montar una ópera de repertorio.

De esta manera el teatro lírico como fenómeno cultural, social y en este caso pedagógico se transforma en algo vivo cada vez, en algo que nos moviliza. La ópera es así cercana, tiene un mensaje que nos es tangible y cotidiano, es participativa. Ópera para todos, para quienes la escuchan y para quienes extienden su mensaje al realizarla. Todo es posible en este mundo.

Queremos convertir el escenario en un viaje en el tiempo. Profundizar en los sentimientos, las costumbres de un pasado remoto donde la forma, la educación y la forma de vivir ya nos es lejana y un poco arcaica, como sería la época elegida para nuestro espectáculo, el siglo XVIII. Su moda, su forma de pensamiento y comportamiento. Todo ello reflejado por el compositor dentro de su obra. Conocer está época por medio del juego y la interpretación.

LA FINTA SEMPLICE: ARGUMENTO

La acción se desarrolla en las inmediaciones de Cremona, Italia, a mediados del siglo XVIII.
3 actos, cuentan la historia del señor de un castillo llamado Cassandro, de su hermano Polidoro y de su hermana Jacinta que viven en un castillo rural en las cercanías de Cremona. Además intervienen el capitán Fracasso, su sargento Simone y su hermana, la baronesa Jacinta. Fracasso se enamora de Jacinta, Simone se enamora de su criada Ninetta. Don Cassandro no quiere consentir los planes de boda. Después de que fueran puestas en práctica multitud de artimañas Don Cassandro cede finalmente, y como se diría en los cuentos de niños… “al final todos serán felices y comerán perdices”.