Un lugar entre la fantasía y la realidad

AlmaViva Teatro adapta la que fue la última obra escrita por William Shakespeare, La tempestad, utilizando espacios no convencionales. En el reparto, además del Premiado José Gonçalo Pais, destaca el conquense Rafa Núñez, que interpreta dos personajes.

Próspero, duque de Milán, ha sido condenado al destierro junto a su hija, Miranda. Esta condena es la que da inicio al último libreto de la bibliografía del genio inglés William Shakespeare, La tempestad. La condena solo sirve para que el hermano de Próspero, Antonio, con la ayuda del rey de Nápoles, Alfonso, se adueñe del ducado milanés.

Pese al destierro, Próspero y Miranda acaban recalando en una isla remota en la que solo hay un habitante, Calibán, el cual, gracias al conocimiento del antiguo duque y al dominio de la magia, logran controlar. Además, libera a Ariel, un espíritu del aire que pasa también a ser controlado por el noble.

Los caprichos del destino hacen que quienes hicieron caer a Próspero, Antonio y Alfonso, viajen cerca de la isla, lo que lleva al antiguo duque de Milán a desatar una gran tempestad con la que persigue impedir su llegada y, así, recuperar el puesto que le hicieron perder.

A medio camino entre la realidad y los sueños

La tempestad, última obra escrita por Shakespeare, está ubicada entre la realidad y el sueño, transitando por todo lo que alude al comportamiento de las personas humanas. A través de una fábula casi mitológica, el Bardo inmortal trenza el encuentro de las relaciones humanas más básicas y hunde su pluma en lo que cada corazón humano puede reconocer como suyo.

La isla en la que se ambienta esta obra es un sitio que flota a pocos pasos de la realidad; no llega a tocar tierra, pero tampoco está en el éter de los sueños. La propuesta de AlmaViva Teatro, compañía que adapta esta obra, se sitúa en un espacio entre los sueños y la vida real, y transita entre las emociones más reales y el caos del subconsciente.

Investigación escénica

AlmaViva Teatro está ubicada en la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz, y en 2015 participó en la programación de la Asociación de Amigos del Teatro con La noche justo antes de los bosques, adaptación de Bernard Marie Koltès.

La compañía fue fundada en 2008 por César Barló, que contó en un principio con estudiantes de la RESAD de Madrid para investigar en dos aspectos. El primero es tratar de llevar a la época actual obras del Siglo de Oro español buscando conexiones con la realidad del momento, como es el caso de obras como S: Segismundo en el espejo de Semíramis, estrenada en el año 2009; o El pleito matrimonial del cuerpo y el alma, estrenada en el Corpus Christi de Yepes (Toledo) en 2008.

La otra línea de investigación teatral es la exploración de espacios no conven-cionales para representar textos clásicos desde una nueva perspectiva. Gracias a esto, la adaptación de Don Juan Tenorio que se hizo entre 2011 y 2013 en un solar del barrio madrileño de La Latina fue muy conocida entre el público.

Otras adaptaciones que se hicieron en espacios no convencionales fueron Fuente Ovejuna: ensayo desde la violencia, que se estrenó en una corrala; y la ya mencionada La noche justo antes de los bosques. La tempestad es la adaptación más reciente dentro de este concepto y ha permanecido varios meses en la sala La Puerta Estrecha del madrileño barrio de Lavapiés, sala que ha coproducido esta obra. Gracias a todo este trabajo, AlmaViva Teatro consiguió en 2016 dos premios Godoff, uno a la Mejor Obra y otro al Mejor Intérprete Masculino.

Una apuesta arriesgada y única

La crítica madrileña ha destacado de esta adaptación la interactividad con el público y que se utiliza un lenguaje sencillo y cercano que permite que la obra pueda ser entendida por el público general, además del aprovechamiento de todos los espacios del teatro para la representación. La obra está llena de detalles, hay música, juego, buena técnica y mucha sensibilidad. Es una propuesta arriesgada y única, llena de una energía vibrante que atrapa al espectador.

Cabe destacar, además, la presencia en el reparto del actor conquense Rafa Núñez, quien dará vida a dos personales: Antonio y Estéfano. Entre los actores, y por su creación de Ariel, hay que mencionar a José Gonçalo Pais, distinguido con el Premio al Mejor Intérprete Hombre de los Premios Godoff 2016. Todo el equipo artístico consigue elevar la obra a un acto teatral puro por su buen hacer y cercanía al público, al menos en ese tipo de espacio no convencional. Seguro que la puesta en escena en el Teatro Auditorio también será sorprendente.